¿Cómo saber si cambiar el líquido de frenos?: Caducidad del líquido de frenos
Cuando el líquido de frenos se encuentra caliente, también puede ocasionar que rebote el pedal debido a que la temperatura del líquido genera burbujas. Es importante revisar todos los componentes del sistema antes de continuar, ya que esto puede dejarlo sin frenos. Según RACE y DGT, el líquido de frenos ha de sustituirse cada dos años, 40 000 kilómetros o si aparece alguna de estas señales:
Tacto esponjoso al pisar el pedal de freno.
Encendido del piloto del ABS en el cuadro de mandos.
Inclinación del automóvil hacia un lado al accionar el freno.
Caducidad del líquido de frenos
¿Cómo saber si tengo que cambiar el líquido de frenos?
Cuando el líquido de frenos se encuentra caliente, es decir, cuando el vehículo ha estado en funcionamiento por un tiempo, se debe revisar el nivel de líquido de frenos en el depósito del vehículo. Si el nivel se encuentra por debajo del mínimo, puede ser indicativo de que hace falta cambiar el líquido de frenos. Además, se puede realizar una inspección visual del color del líquido. El líquido de frenos nuevo es transparente, pero con el uso y el paso del tiempo tiende a oscurecerse. Si el líquido se ve oscuro, es un signo de que necesita ser reemplazado. Otro indicio de que es necesario cambiar el líquido de frenos es si se detecta la presencia de burbujas en el líquido, lo que puede ser señal de que hay aire en el sistema, lo que afecta el rendimiento de frenado.
El líquido de frenos caduca
El líquido de frenos tiene una vida útil limitada, generalmente se recomienda cambiarlo cada dos años. El intervalo de cambio por kilometraje puede variar dependiendo del fabricante del vehículo, pero en general se aconseja sustituir el líquido de frenos cada 40.000 – 50.000 kilómetros. Aunque no se utilice el vehículo con frecuencia, el líquido de frenos sigue absorbiendo humedad del aire con el tiempo, lo que puede afectar su rendimiento. Por esta razón, se recomienda cambiar el líquido de frenos cada dos años, incluso si no se ha alcanzado el kilometraje recomendado.
Importancia de cambiar el líquido de frenos
El líquido de frenos es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema de frenado de un vehículo. Su tarea es transmitir la presión ejercida sobre el pedal de freno a las pinzas o zapatas que ejercen la fricción sobre los discos o tambores. Cuando el líquido de frenos está en mal estado, ya sea por su caducidad o por la presencia de humedad, puede perder propiedades como el punto de ebullición, lo que afecta la capacidad de frenado del vehículo. Por esta razón, es crucial cambiar el líquido de frenos de forma periódica para garantizar un sistema de frenado eficiente y seguro.
Consecuencias de no cambiar el líquido de frenos
Si no se cambia el líquido de frenos de forma periódica, puede acumular humedad y suciedad que afectan su punto de ebullición. Cuando el líquido de frenos hierve, se forma vapor en el sistema, lo que puede causar la pérdida parcial o total de la capacidad de frenado, especialmente en situaciones de frenado brusco o prolongado. Además, la presencia de humedad puede ocasionar corrosión en los componentes del sistema de frenado, lo que puede resultar en costosas reparaciones. Por lo tanto, no cambiar el líquido de frenos de forma regular puede comprometer seriamente la seguridad del vehículo y sus ocupantes.
Proceso de cambio del líquido de frenos
El cambio de líquido de frenos es un proceso relativamente sencillo, pero que requiere de cuidado y precisión. En primer lugar, se debe ubicar el depósito del líquido de frenos en el vano motor del vehículo. Se recomienda limpiar el área alrededor del depósito para evitar que entre suciedad al sistema al retirar la tapa. Luego, se extrae el líquido de frenos viejo con la ayuda de una pistola de succión o una jeringa, procurando no derramarlo sobre la pintura del vehículo, ya que puede dañarla. Posteriormente, se llena el depósito con líquido de frenos nuevo, procurando no derramarlo ni contaminarlo con aire o humedad. Es importante purgar el sistema, es decir, eliminar el aire que pueda haber ingresado, para garantizar un correcto funcionamiento del sistema de frenado. Finalmente, se coloca la tapa del depósito y se prueba el sistema de frenos para verificar que todo funcione correctamente.
Coste de cambiar el líquido de frenos
El coste de cambiar el líquido de frenos puede variar dependiendo del vehículo, la marca y tipo de líquido de frenos a utilizar, así como del taller o servicio mecánico donde se realice el cambio. En general, el precio puede oscilar entre los 50€ y los 100€, teniendo en cuenta la mano de obra y el material necesario. Es importante recordar que cambiar el líquido de frenos es una inversión en seguridad, por lo que el coste asociado al cambio debe ser considerado como parte del mantenimiento periódico del vehículo.
Prevención y mantenimiento del sistema de frenado
Además de cambiar el líquido de frenos de forma periódica, es importante llevar a cabo un mantenimiento preventivo del sistema de frenado. Esto incluye la revisión regular de las pastillas de freno, discos, zapatas y tambores, así como el correcto ajuste del freno de mano. También es recomendable verificar el estado de los discos y tambores en busca de marcas de desgaste o corrosión. Mantener el sistema de frenado en óptimas condiciones es fundamental para garantizar la seguridad en la conducción, por lo que se debe prestar especial atención a su mantenimiento.
¿Puedo cambiar el líquido de frenos yo mismo?
Cambiar el líquido de frenos es una tarea que requiere cuidado y precisión, por lo que si no se tiene experiencia o conocimientos en mecánica automotriz, es recomendable dejar esta tarea en manos de profesionales. Un error en el proceso de cambio del líquido de frenos puede comprometer seriamente la seguridad del vehículo y sus ocupantes. Además, se debe tener en cuenta que el líquido de frenos es un residuo peligroso que debe ser eliminado de forma adecuada, siguiendo las normativas medioambientales. Por lo tanto, si no se está seguro de cómo realizar el cambio de líquido de frenos correctamente, es mejor acudir a un taller o servicio especializado.
Importancia de la elección del líquido de frenos
La elección del tipo de líquido de frenos es crucial para garantizar un funcionamiento óptimo del sistema de frenado. Existen diferentes especificaciones de líquido de frenos, como DOT 3, DOT 4, DOT 5, entre otros, y cada una tiene propiedades específicas. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo en cuanto al tipo de líquido de frenos a utilizar, ya que utilizar un líquido no adecuado puede afectar el rendimiento del sistema de frenado y comprometer la seguridad. Por esta razón, al cambiar el líquido de frenos, se debe asegurar que se está utilizando el tipo correcto de acuerdo a las especificaciones del fabricante.
