Si eres propietario de un vehículo diésel, es probable que hayas escuchado hablar de la válvula EGR en más de una ocasión. Pero, ¿sabes realmente qué es y para qué sirve?
La recirculación de gases de escape o EGR es un sistema utilizado desde principios del 1970, que consiste en redirigir una parte de los gases de escape de los motores de combustión hacia el colector de admisión, para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno.
En este post te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre la válvula EGR, su funcionamiento, la importancia de su mantenimiento y los problemas que puede ocasionar si no se encuentra en óptimas condiciones.
Qué es la válvula EGR
La recirculación de gases de escape, conocida como EGR por sus siglas en inglés (Exhaust Gas Recirculation), es un sistema cada vez más común en los motores diésel y de gasolina. Esta válvula permite redirigir una parte de los gases de escape de vuelta a la cámara de combustión, con el objetivo de reducir la emisión de óxidos de nitrógeno (NOx) y controlar la temperatura del motor.
La válvula EGR es un componente crucial para el control de emisiones en los vehículos modernos, ya que contribuye a la reducción de la contaminación atmosférica y al cumplimiento de las normativas medioambientales. Su correcto funcionamiento es esencial para el rendimiento óptimo del motor y la eficiencia en el consumo de combustible.
¿Qué es y para qué sirve la válvula EGR?
La válvula EGR se encarga de recircular parte de los gases de escape hacia la admisión del motor, reduciendo así la formación de NOx durante la combustión. Al introducir estos gases inertes en la cámara de combustión, se disminuye la temperatura de la llama, lo que a su vez reduce la formación de óxidos de nitrógeno.
Esta recirculación de gases permite optimizar la eficiencia en la combustión, mejorar el rendimiento del motor y disminuir la emisión de contaminantes. En resumen, la válvula EGR contribuye a la reducción de la contaminación ambiental y al cumplimiento de las normativas anticontaminación, sin comprometer el rendimiento del motor.
¿Qué significa EGR en motores diésel?
Las siglas EGR significan Exhaust Gas Recirculation, que traducido al español sería Recirculación de Gases de Escape. Este sistema es especialmente relevante en los motores diésel, donde la formación de óxidos de nitrógeno es más pronunciada debido a las altas temperaturas de combustión.
La válvula EGR en los motores diésel permite reducir la emisión de NOx al recircular una parte de los gases de escape, lo que contribuye a un funcionamiento más limpio y respetuoso con el medio ambiente. Es un componente clave en la tecnología diésel moderna para cumplir con los estándares de emisiones contaminantes.
Función de la válvula de recirculación de gases de escape
Mediante la recirculación de los gases de escape, la válvula EGR tiene como función principal reducir la formación de óxidos de nitrógeno (NOx) en el motor, especialmente en condiciones de alta temperatura y alta presión. Al reintroducir estos gases en la cámara de combustión, se diluye el oxígeno y se reduce la temperatura de la combustión, lo que a su vez disminuye la creación de NOx.
Además de contribuir a la reducción de emisiones contaminantes, la válvula EGR también ayuda a prevenir el picado del motor, reduce la temperatura de la cámara de combustión y disminuye la generación de gases de efecto invernadero. En resumen, esta válvula desempeña un papel fundamental en la eficiencia y la limpieza del funcionamiento del motor.
¿Cuándo se activa el EGR?
La válvula EGR se activa durante determinadas condiciones de funcionamiento del motor, como a baja carga y a bajas revoluciones, donde la temperatura de combustión es más elevada y se produce una mayor formación de óxidos de nitrógeno. En estos momentos, la recirculación de los gases de escape ayuda a reducir la temperatura y la formación de NOx, contribuyendo así a un funcionamiento más limpio y eficiente del motor.
Es importante destacar que el correcto funcionamiento de la válvula EGR es esencial para el rendimiento y la eficiencia del motor, por lo que su mantenimiento y limpieza periódica son fundamentales para evitar obstrucciones y garantizar su operatividad.
¿Cómo funciona la válvula EGR?
El funcionamiento de la válvula EGR se basa en la apertura y cierre controlado de una válvula que regula el flujo de gases de escape recirculados hacia la admisión del motor. Esta apertura se gestiona electrónicamente por la centralita del vehículo, en función de las condiciones de funcionamiento del motor y las necesidades de reducción de emisiones.
La válvula EGR puede funcionar de forma neumática, eléctrica o mediante un actuador, y su apertura se calcula en función de la carga del motor, la temperatura de escape y otros parámetros. Este control preciso del flujo de gases recirculados permite optimizar la eficiencia en la combustión y reducir la formación de contaminantes.
Importancia de la válvula EGR en los motores modernos
En los motores modernos, la válvula EGR desempeña un papel fundamental en el control de emisiones contaminantes y en el cumplimiento de las normativas medioambientales. Al contribuir a la reducción de los óxidos de nitrógeno (NOx) y a la optimización de la eficiencia en la combustión, esta válvula permite que los vehículos cumplan con los estándares de emisiones y respeten el medio ambiente.
Además, la válvula EGR también tiene un impacto positivo en la eficiencia en el consumo de combustible, al mejorar la eficiencia en la combustión y reducir la generación de gases contaminantes. Su correcto funcionamiento y mantenimiento son fundamentales para garantizar un rendimiento óptimo del motor y una menor huella ecológica del vehículo.